Valdefresno

Raza salmantina con raíz Atanasio

La ganadería Valdefresno, creada por Nicasio Rodríguez Fraile, es una de las ramas más reconocibles del histórico encaste Atanasio Fernández – Lisardo Sánchez, que tantos éxitos y toros bravos ha dado a lo largo de la historia. Desde su fundación, Valdefresno ha mantenido una línea de toro serio, con clase y profundidad, muy del gusto del aficionado clásico.

Situada en plena dehesa salmantina, esta ganadería ha sabido conservar la identidad de un encaste que fue hegemónico durante décadas y que hoy lucha por seguir ocupando su lugar en las ferias importantes.

Origen y encaste

Valdefresno nace en los años 90 como escisión de la ganadería de Baltasar Ibán y posteriormente de la de Lisardo Sánchez, cuando Nicasio Rodríguez Fraile, miembro de la histórica familia ganadera salmantina, decide emprender su camino con ganado de esta procedencia. El resultado fue una ganadería basada en el encaste Atanasio Fernández, una de las ramas más clásicas del tronco Parladé.

Los animales pastan en la finca “Valdefresno”, situada en Tabera de Abajo (Salamanca), en el corazón de la tierra charra, donde se crían con mimo y exigencia toros que conservan la morfología clásica del encaste: cuerpos voluminosos, cornamentas serias y mirada profunda.

Un toro con trapío, nobleza y fondo

El toro de Valdefresno destaca por su presencia imponente, con gran caja y pitones bien desarrollados. En el ruedo, se caracteriza por su embestida templada, humilladora y con nobleza, aunque sin perder el punto de exigencia que permite medir al torero.

Su fondo y duración permiten faenas en las que el torero debe administrar la bravura con temple e inteligencia. No es un toro explosivo, sino un animal que suele crecer en la faena y brindar profundidad al toreo cuando se le entiende.

Presencia constante en las ferias

Valdefresno ha lidiado en plazas de primera y segunda categoría, con destacadas actuaciones en Madrid, Bilbao, Salamanca, Zaragoza o Burgos, donde sus toros han sido premiados por su seriedad y comportamiento.

Toros de este hierro han permitido faenas importantes a matadores como Juan del Álamo, El Cid o Morenito de Aranda, siendo reconocidos por su regularidad, clase y entrega en la muleta.

Fieles a una línea histórica

A pesar de los cambios de gustos en el toreo contemporáneo, Valdefresno ha mantenido su fidelidad al encaste que le da nombre. Con una selección rigurosa, la ganadería sigue defendiendo el toro clásico, con bravura templada, clase y fondo, tan demandado por los aficionados más entendidos.

Valdefresno es, hoy por hoy, una de las ganaderías que mejor representa el legado del campo charro, siendo una apuesta segura para quienes valoran la autenticidad del toro de lidia con personalidad.